La plantilla de la residencia de ancianos de La Granja, dependiente de la Junta de Andalucía, ha dado un paso más en las concentraciones que lleva a cabo desde antes del verano por la falta de cobertura de las vacantes. 

Además de protestar cada martes y jueves de la semana en la hora del desayuno, en la jornada de ayer repartieron octavillas a los ciudadanos de la zona para hacerles partícipes de la situación que soportan en su centro de trabajo, donde la falta de personal se está haciendo insostenible. Aseguran que la situación es “extrema” y que en el caso de los departamentos de cocina y de auxiliar de clínica están “bajo mínimos”, lo que deriva en el “desgaste” de los trabajadores y está “resintiendo” el trato a los abuelos.

“En la plantilla faltan siete personas de la RPT (Relación de Puestos de Trabajo) y eso se nota porque en una de las plantas por la tarde se quedan dos personas para 30 y tantos abuelos y estamos así desde mayo, hemos tenido un verano caótico, como nunca lo habíamos vivido”. Ante estas circunstancias, entre los trabajadores ya se baraja la posibilidad de hacer paros para hacer presión ante la Administración andaluza.