El sector fresero onubense viene sufriendo desde hace años los mismos problemas en determinados momentos de la campaña de la recolección de la fresa y todas las temporadas se producen en determinados momentos picos de producción que, combinados con otros factores, hacen que el precio de la fresa se venga abajo tanto en los mercados nacionales como en los europeos.
No obstante este año, según fuentes del sector, la situación está llegando a ser “catastrófica”, porque la caída de los precios, además de ser más acusada que en ocasiones anteriores (según los datos de Freshuelva de hasta el 20% con respecto a la anterior campaña, que reconocen que ya fue mala), ha venido antes sobre todo por las condiciones meteorológicas de finales del pasado mes de mayo.
Hay empresarios agrícolas que prácticamente han dado ya la campaña por perdida, tras llevar vendiendo ya varias semanas su mercancía por debajo del costo de producción. Y es que el precio de la fresa ha llegado a bajar hasta los 0,80 o 0,90 euros el kilo en los mercados mayoristas, cuando producir esa misma cantidad cuesta al agricultor entre 0,90 y 0,95 euros. Precisamente, para “evaluar la situación de los mercados en la campaña actual” la interprofesional de la fresa, Interfresa, ha convocado para este martes una reunión de todo el sector en las dependencias de la Caja Rural del Sur en Huelva.
En este sentido según fuentes del sector consultadas por Viva Huelva, el principal objetivo no es otro que estudiar las medidas a adoptar “para corregir todo lo que está pasando”. Medidas que para algunos empresarios deben ser tan “drásticas” como “por ejemplo retirar toda la producción de los mercados en determinados momentos de la campaña”. No obstante también lamentan, como es el caso del representante de la Unión de Pequeños Agricultores en Huelva (UPA-Huelva), Antonio Luis Martín González, que “ya nos reunimos el año pasado con la misma historia, pero al final no se ha hecho nada. No ha habido ninguna asamblea desde entonces, que fue después de la Semana Santa”.
De todas formas, asegura albergar cierta esperanza ya que también se muestra convencido de que “aún se está a tiempo de hacer algo, aunque sea tan solo por intentar recuperar la inversión que los empresarios hemos realizado este año”. Es por ello por lo que ve “fundamental” el encuentro de este martes, la cual a su juicio “debe servir para intentar corregir la insostenible situación actual, que de seguir así desembocará en una catastrófica la campaña si no se reactivan los precios en los mercados”.
Y es que según ha explicado, el sector está a punto enfrentarse un año más a la quincena tradicionalmente más complicada de la campaña, que según ha explicado se origina entre el Jueves Santo y el Domingo de Resurrección. Días en los que “los productores recolectamos las fincas pero en los que, como los mercados están inactivos por las vacaciones de Semana Santa, se produce tal saturación el martes después de la fiesta que los precios se derrumban año tras año, al menos durante las dos semanas posteriores”. No obstante insiste en que para evitar esta situación, la única salida es “adoptar medidas drásticas” como “retirar del mercado toda la fruta durante esos días clave y no acumular mercancía para después sacarla toda al mercado de golpe”. Por otra parte, y más a medio y largo plazo, según Martín González, la asamblea de Interfresa de hoy debe servir para “establecer mecanismos y buscar herramientas para que sea el propio sector el que se autorregule, y podamos así evitar que se repitan estas situaciones de cara al futuro”.
“Espejismo” de dos días
Por otra parte, otros empresarios agrícolas han apuntado a VIVA que la actual evolución de los precios “sigue mal” y a pesar de que tras el derrumbe de hace un par de semanas, el kilo de fresa se restableció a mediados de la pasada semana superando incluso los 2,30 euros en algunas ocasiones, “eso no fue más que un espejismo que duró apenas un par de días y que se produjo porque algunas cooperativas retiraron su producto del mercado y porque hubo una bajada de temperaturas, ya que el pasado viernes se volvieron a derrumbar y se situaron de nuevo entre 0,80 y 0,90 euros en bruto el kilo en los mercados nacionales”.
Según las fuentes consultadas, el precio debería situarse en torno a los 1,5 euros el kilo “no para ganar dinero, aunque sí para cubrir costes y poder recuperara la inversión realizada este año”. Y “lamentablemente –concluyen- a estas alturas de la campaña ese es ya prácticamente el único objetivo por el que tenemos que luchar”.