La Xunta ha publicado este miércoles en el Diario Oficial de Galicia la resolución por la que se incoa el procedimiento para declarar Bien de Interés Cultural (BIC) el Pazo de Lourizán (Pontevedra).
Según recoge el documento, el Pazo de Lourizán es "una edificación singular en Galicia" en la cual concurren "tanto los valores artísticos y arquitectónicos propios de su formulación", como los históricos relacionados con la figura de su promotor, Eugenio Montero Ríos.
Asimismo, también se recoge los valores científicos y técnicos derivados de la adquisición del edifico a mediados del siglo XX por la Diputación de Pontevedra para destinarlo a sede de diversas instituciones.
En la actualidad, el Pazo de Lourizán, cuya cesión desde la Diputación a la Xunta acaba de ser aprobada, forma parte del Catálogo del Patrimonio Cultural de Galicia, por lo que cuenta con un nivel de protección que se verá ahora incrementado.
VALORES DE LA CONSTRUCCIÓN
En la resolución, la Xunta destaca los "valores arquitectónicos" del Pazo, ejemplo de "arquitectura civil de estilo ecléctico, con elementos configuradores propios del estilo conocido como Segundo Imperio Francés". Teniendo en cuenta su carácter y dimensión, "se puede considerar único en Galicia".
Además, la Administración pone en valor los diferentes periodos históricos de su conformación y su "capacidad de adaptación a diferentes usos", desde la granja original a una quinta de recreo y, posteriormente, una residencia con funciones representativas.
Su configuración actual responde, principalmente, a la reforma y ampliación abordada bajo el proyecto del maestro de obras Jenaro de la Fuente entre 1909 y 1912 sobre lo que era una casa de campo, quinta y granja anterior, de la que se conservan partes y construcciones propias de actividades agrarias y ganaderas, como el palomar, el molino y el hórreo.
Más allá del pazo y de las construcciones anexas, la resolución también hace mención de sus jardines y del arbolado generado en la finca, "uno de los más importantes de Europa, donde pueden verse especies vegetales traídas de otras latitudes e incluso modificaciones singulares de especies para adaptarlas al clima de Pontevedra".
HISTORIA
La finca de Lourizán fue propiedad de la familia Montenegro al menos desde finales del siglo XV. En el lugar se construyó una casa-torre fortificada en la que en 1609 Luis de Góngora pasó una temporada y escribió una parte de su libro 'Soledades'.
Durante el siglo XVIII y primeras décadas del XIX existen documentos que vinculan la propiedad y sus transmisiones al Marqués de Castelar y de la Sierra, Francisco Genaro Ángel, Atanasio Pulgar y Pedro Pulgar del Castaño. Fueron los herederos de este último los que la alquilaron, el 26 de agosto de 1876, a Eugenio Montero Ríos que, posteriormente, la adquirió y disfrutó hasta su muerte.
El 21 de junio de 1943 se celebró una sesión extraordinaria en la Diputación Provincial de Pontevedra para la adquisición de una finca en la que instalar el Centro Regional de Enseñanzas, Investigaciones y Experiencias Forestales y, el 8 de octubre de ese año, se realizó la compra de la finca de Lourizán.