Renueva su contenido aunque buena parte "resuma" la Exposición Universal del 92
El Pabellón de la Navegación de la Expo 92 ha abierto hoy sus puertas al público con parte de los contenidos que tuvo en la muestra universal, como la colección de maquetas de barcos históricos, y con otros audiovisuales e interactivos nuevos, según ha dicho a Efe su director, Javier Sanchidrián.
El edificio, según su director, "rezuma navegación por los cuatro costados" porque sus materiales y sus formas evocan a los barcos y por su situación, ya que su planta arranca desde el mismo nivel de la lámina de agua del río Guadalquivir, frente al casco histórico de la ciudad de Sevilla.
Sanchidrián ha destacado el "discurso actual" que han seguido los contenidos y que hace que el Pabellón de la Navegación y sus contenidos sean apropiados para niños, por sus elementos interactivos, y para interesados en la navegación por su "absoluto rigor histórico".
El profesor de la Universidad de Sevilla Pablo Emilio Pérez Mallaína, especialista en historia de la navegación y de América, ha sido asesor para el diseño de los contenidos, en el que también ha intervenido Antonio Fernández Torres, uno de los tripulantes de la réplica de la Nao Victoria que ha dado la vuelta al mundo.
A la una de la tarde de hoy ya habían entrado en el Pabellón unas trescientas personas, si bien su director ha considerado que hasta 700 u 800 diarias la visita puede hacerse con comodidad.
La exposición permanente consta de cuatro salas, la primera de las cuales se dedica a la navegación desde el punto de vista humano, con el denominado "mar de luces" integrado por medio millón de puntos de luz, un mar de mil metros cuadrados que se atraviesa como si se tratara de una travesía marítima.
Mientras se efectúa esta travesía, los visitantes del Pabellón podrán escuchar relatos de antiguos viajes marítimos de boca de sus protagonistas, personajes históricos cuyas peripecias han sido extraídas del Archivo de Indias de Sevilla.
La ciencia y la técnica se han reservado para la segunda sala, con la colección de maquetas de barcos históricos que tuvo el Pabellón durante la Expo 92, además de elementos destinados a contar lo que supuso el salto del Océano Atlántico y el descubrimiento de América, y otros que hacen referencia al futuro, como un proyecto de barco ecológico que aún no navega.
La tercera sala muestra cómo es la vida abordo de un barco y muestra los elementos de una nave, que pueden tocarse y manejarse, mientras que la cuarta sala describe las relaciones de la navegación con la ciudad de Sevilla, que fue Puerto de Indias y que aún es puerto fluvial.
Esta cuarta sala es el paso previo a la torre Schindler, que ofrece vistas panorámicas de la ciudad de Sevilla y del río Guadalquivir a su paso por el casco urbano.
Tras doce años cerrado, el edificio ha requerido una inversión de once millones de euros y una remodelación que ha corrido a cargo del arquitecto que lo diseñó, Guillermo Vázquez Consuegra, y que ha previsto otros usos, como celebración de actos culturales de diversa índole.
El horario de apertura del centro expositivo será de 10,00 a 19,30 horas de martes a sábado y de 10,00 a 15,00 horas los domingos y festivos, y la entrada normal costará 4,90 euros, si bien será de 3,50 para grupos, estudiantes, jubilados y familias numerosas.