Si ya es difícil llegar a fin de mes con la subida del IVA, el incremento del desempleo y los recortes en las nóminas, guardar dinero es casi misión imposible para muchas familias. Según el Banco de España, el nivel de ahorro de los gaditanos ha caído por primera vez desde 1986 si se toma como referencia las cifras registradas en marzo de todos esos años.
Según estos datos (los últimos publicados por el Banco de España), las familias tenían en el banco un total de 11.364 millones de euros a finales de marzo, 620 millones menos que en el mismo periodo del año anterior. Si dividiésemos esa cantidad por cada habitante de la provincia, cabría a una media de 9.600 euros por persona.
Este comportamiento tiene una explicación sencilla. La incertidumbre del principio llevó a que las familias se apretaran el cinturón para incrementar sus depósitos, pero la coyuntura adversa está durando tanto tiempo que no se puede mantener el ritmo, y los gaditanos no tienen más remedio que tirar de los ahorros para vivir.
Por otro lado, el nivel de endeudamiento también ha decrecido, algo que desde el año 1986 sólo ha ocurrido durante los dos últimos años. A pesar de todo, la comparación no es nada alentadora, ya que de ella se desprende que los gaditanos deben más del doble de lo que tienen ahorrado. Esto es 25.000 millones de euros, o lo que es lo mismo, 20.100 euros por cabeza.
El Boom del ladrillo, en las cuentas
En la serie histórica del Banco de España se constata el reflejo que ‘boom del ladrillo’ tuvo sobre el endeudamiento de los gaditanos. Los picos más altos se produjeron entre 2000-2004 con incrementos interanuales de 11.000 millones de euros.
No sólo no ahorramos, sino que gastamos ‘lo sagrado’
Uno de los principales temores de las familias es verse obligados a utilizar el dinero que con tanto esfuerzo y tantos años de trabajo han ido guardando con la idea de emplearlo en un futuro para algún plan concreto como pueden ser los estudios de los hijos. Según el Banco de Españ es la primera vez desde 1986 que los gaditanos se ven obligados a sacar el dinero que tienen en depósito para poder afrontar los gastos del día a día. p. m.