La Banda Municipal de Música de Jaén está atravesando por un momento delicado, de desmotivación. Por lo que se ve hay quienes pueden estar tratando de quitarle el protagonismo que se merece a esta Agrupación centenaria que es uno de los grandes orgullos de la ciudad, y si esto es así se encontrarán con la respuesta de cientos de jienenses que conocen y valoran su trayectoria, y desde luego su excelente nivel musical puesto de manifiesto en multitud de ocasiones y reconocido dentro y fuera de los límites jienenses. Ya sabemos que estamos en una población que no es muy dada a movilizarse en favor de  expresiones de nuestra identidad como jienenses, que en ocasiones corren peligro, pero estamos convencidos de que esto no va a ocurrir con la Banda y que el Ayuntamiento tiene que ser consciente, por medio de su Patronato de Cultura, de que la Banda Municipal necesita estar bien dotada de medios humanos y materiales para desarrollar su gran labor. Con una cualquiera de las muchas actividades culturales de caché que, por fortuna, y lo decimos con satisfacción, promueve el Ayuntamiento, se podrían atender las necesidades que tiene la Agrupación Musical para un funcionamiento adecuado. Lo ocurrido el pasado domingo, en la inauguración de la temporada de conciertos, donde hubo que modificar el programa por las ausencias de profesores, que en realidad no es más que la continuación de un cúmulo de problemas que responden al denominador común de la falta de interés y de atención hacia la Banda, nos ha puesto en alerta de lo que muchos jienenses no estamos dispuestos a dejar que ocurra. Habrá que crear una Asociación de Amigos de la Banda o los muchos aficionados tendrán que buscar la fórmula de inquietar a las autoridades, pero su futuro no debe de hacerse depender del mayor o menor entusiasmo de los concejales de cada momento.

No es la primera vez en su historia que la Banda atraviesa por dificultades, también es cierto que en las situaciones extremas han aparecido responsables sensibles que han sabido valorar el prestigio de un colectivo que a tantos jienenses nos trae recuerdos de esas grandes piezas tan ligadas al Jaén sentimental como las que tuvieron como autor al inolvidable maestro Cebrián, y no olvidamos, entre sus directores, a los últimos, el maestro José Sapena, el excelente músico y mejor persona que es el maestro Manuel Vílchez, al que tanto debe la música de la ciudad, y a su actual director, el entusiasta Juan Antonio García Mesas, cuya lucha no está siendo proporcional a la respuesta que merecen del Ayuntamiento. No pedimos para nuestra Banda Municipal de Música otra cosa que no sea colocarla en el lugar de privilegio que se merece la que durante tanto tiempo ha logrado emocionarnos a los sones de los himnos más emblemáticos de esta tierra, el de Nuestro Padre Jesús y el irrepetible Himno a Jaén.