Miles de abogados vigilarán los centros de votación de Estados Unidos el próximo 4 de noviembre para impedir cualquier intento de fraude en unas elecciones en las que, según nuevos datos, la participación puede alcanzar un récord histórico.
Sólo en Florida, el Partido Demócrata cuenta con el respaldo de 5.000 voluntarios, la mayor operación de todo el país, para supervisar el proceso, porque, según muchos de sus militantes, se favoreció injustamente al presidente Bush hace ocho años.
El soleado estado del sur del país se hizo famoso en el 2000 por un fiasco electoral que obligó a un largo recuento de las papeletas y donde finalmente se impuso Bush por una diferencia de tan sólo 537 votos frente a su rival demócrata Al Gore.
Ben Porritt, portavoz de la campaña republicana, dijo ayer al diario USA Today que su partido cuenta también con un amplio respaldo legal, sobre todo en los estados más reñidos como Ohio, Florida o Misuri, aunque no ofreció cifras concretas.
Además, los grupos defensores de los derechos civiles desplegarán a 10.000 voluntarios en las urnas el día de las elecciones en 25 estados del país, el mayor esfuerzo de la historia, según Jon Greenbaum, del Comité de Abogados a Favor de los Derechos Civiles. La coalición tiene una línea telefónica especial que ha recibido ya más de 50.000 llamadas y el próximo martes prevén habilitar 32 centros de para reportar eventuales irregularidades, la mayoría de los cuales estarán ubicados en despachos de abogados.
Los observadores consideran “muy remota” la posibilidad de que las elecciones se decidan solamente en un estado, pero alertan de que el problema este año es el gran interés suscitado por la campaña, que se espera atraiga una cifra récord de estadounidenses a las urnas. La elevada participación en los 30 estados que permiten votar por adelantado y por donde han desfilado al menos ya unos 17 millones de estadounidenses podría ser un presagio de lo que se avecina.
La avalancha de millones de nuevos votantes podría traducirse en centros electorales abarrotados y en situaciones polémicas como las comprobaciones de identidad de último minuto en las que se podría negar la papeleta a aquellos cuyos documentos no coincidan con el nombre archivado en otros registros gubernamentales.
Ana Martínez, subdirectora política del Partido Demócrata, explicó a Efe que esa posible participación récord explica en gran medida las “increíbles” cifras de reclutamiento de voluntarios expertos en temas legales. Agregó, además, que esas previsiones llevaron al partido a lanzar una campaña de movilización para impulsar el voto por anticipado.
Douglas Chalmers, que preside la Asociación de Abogados de Georgia a favor de McCain, dijo a Efe que el reclutamiento de abogados ha sido también récord entre los conservadores del estado que cuentan con el apoyo de “cientos” de asistentes legales.