El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha defendido hoy la existencia del Mando de Adiestramiento y Doctrina del Ejército de Tierra (Madoc), con sede en Granada, pero ha considerado necesario "racionalizar al máximo" su organización para que produzca "cada vez mejor" y con coste y eficiencia "razonables".
Morenés, que ha visitado hoy el Madoc para entrevistarse con su teniente general jefe, Francisco Puentes Zamora, ha manifestado a los periodistas que aunque Defensa, "al igual que la sociedad española", atraviesa por momentos de dificultad económica, no hay ninguna decisión tomada sobre la existencia o no de determinados establecimientos militares.
En el caso del Madoc, ha considerado "esencial" su función, consistente en la elaboración de doctrina y su enseñanza, y necesaria su existencia "fuera del ámbito más cercano a lo que puede ser el Estado Mayor de la Defensa o el Ejército de Tierra".
Por ello, entiende en principio que "no está mal" ubicado, aunque habría que "racionalizar al máximo" su organización para que produzca "cada vez mejor" y con un coste y una eficiencia "razonables", ha precisado el ministro.
Morenés ha señalado no obstante que del análisis de la situación actual se derivará el diseño de las Fuerzas Armadas que necesita España para afrontar de una manera "más eficaz" el actual escenario de "riesgos y amenazas".
Las decisiones que se deriven de esa revisión de la situación actual "serán las que sean", ha indicado el ministro, quien ha explicado que definidas esas necesidades, se adoptarán una serie de medidas que "afectarán o no a determinados establecimientos militares".
Interrogado sobre los pagos pendientes del Ministerio de Defensa a la industria, Morenés ha admitido que hay unos programas especiales de armamento que tienen un "importante" alcance económico que se convertirá en deuda una vez se vayan entregando los sistemas de armas que los componen.
Y lo que hará ahora Defensa, ha explicado, es renegociar con las empresas las entregas, limitar el alcance de los programas y atender a los compromisos ya contraídos, aspecto este último que, cree, podrán sacar adelante "a través de nuestra conexión con el Ministerio de Hacienda".
"Eso nos va a permitir un tiempo necesario para poder abordar las otras dos acciones: el posponer algunos programas y reducir otros", ha señalado el ministro.
Por otra parte, se ha referido al programa Leopard, cuyos carros de combate se producen en Sevilla con patente alemana y por cuya compra se interesa actualmente el gobierno de Arabia Saudí, para señalar que sigue su curso.
Morenés ha precisado que es la industria la que sirve a Defensa y no al revés, y por ello ha considerado necesario que la industria se abra al mercado internacional.
El ministro, para quien la posibilidad de que el programa Leopard salga a Arabia Saudí es "una oportunidad en la que habrá que trabajar mucho", ha dicho que con Avantia ocurre lo mismo.
Morenés ha manifestado que desde el punto de vista de los recursos con los que dispone Defensa -cuyo presupuesto se ha reducido un 80 % desde 2008-, el Ministerio no puede abordar actuaciones que comprometan el cien por ciento del presupuesto en un solo programa.
"Hay que priorizar y saber bien qué es lo importante para el Ministerio de Defensa", ha dicho el ministro.
En relación a la adjudicación del contrato para la construcción de un nuevo vehículo blindado de ruedas 8x8, al que aspira la fábrica de pólvoras Santa Bárbara de Granada, ha dicho que la idea del Ministerio es atender a lo que ya está contratado en la industria y después "abrir hueco" a un programa que podría ser éste.
Se trata, ha dicho, de "utilizar un nuevo programa cuando podamos hacerlo, precisamente para consolidar la industria nacional de Defensa", que hoy está "especialmente atomizada".