La
Feria de Abril de Sevilla ha sido escenario de un
confrontamiento político cuando María Jesús Montero, vicepresidenta del Gobierno, fue
increpada por un grupo de jóvenes. Durante su visita al recinto festivo, los jóvenes la abordaron gritando "
¡traidora!", lo que provocó una respuesta inmediata de la política. Ante los gritos, Montero se defendió con una sonrisa y diciendo: "Traidora, ¿por qué? No, no", mostrando
desacuerdo frente a las acusaciones.
El incidente no terminó con el intercambio verbal entre Montero y los jóvenes, ya que
uno de los acompañantes de la vicepresidenta intervino. Este, en un intento de
defender a Montero, se enfrentó a los jóvenes diciéndoles que se marcharan, elevando la tensión del momento.