Belén Cerezuela, una de las dos vecinas de Los Palacios y Villafranca (Sevilla) que ayer encontró a una bebé recién nacida en un contenedor de basura, ha dicho a EFE que si hubiesen tardado un poco más en encontrarla "se habría muerto de frío".
En declaraciones a EFE, la mujer ha explicado junto al mismo contenedor que no ha podido dormir en toda la noche pensando en que la niña podría haber muerto, a la vez que se pregunta qué habría pasado si la niña "no arranca a llorar", un llanto muy débil, ha dicho, pero suficiente para ser escuchada desde fuera del contenedor por ella y Antonia, otra vecina de la calle Mariano Benlliure del municipio sevillano.
La mujer, de 41 años, ha recordado que iba por la calle cuando un vecino la llamó "porque había visto una bolsa en el contenedor que le llamó la atención porque escuchó como un llanto", y en ese momento, dice, "este hombre no daba crédito a lo que estaba viendo, y era un bebé, era un recién nacido".
"Lo sacamos corriendo y una vecina que iba pasando pidió una mantita para que lo tapara y le diera calor, y de momento lo llevamos al centro de salud", ha dicho, para añadir que desde el primer momento vieron que era una niña "y se le veía las piernecitas por fuera de la bolsa y el cordón umbilical que lo tenía bastante largo".
Las dos mujeres y el hombre taparon a la bebé como pudieron para guarecerla del intenso frío, y la pusieron sobre un cartón, "sin saber lo que teníamos que hacer, ni siquiera si quitarle las bolsas que la cubrían", hasta que la llevaron al centro de salud.
Belén Cerezuela ha manifestado que a la Guardia Civil le dijeron que "un rato más y muere de frío, o asfixiada por estar metida en unas bolsas de plástico".